sábado, mayo 28, 2005

Pshhhhhhhhhhhhhhhhhuuuuuuuuuuuuffffff! Pssssssssssshhhhhhhhhhhhhhhhuuuuuuufffff! Sé que suena a Darth Vader (muy grande el episodio 3, creo que no conté nada, pero me lo pasé genial viéndola) pero no. Es un sonido que me encanta. Es un estado que me encanta. Se trata de cuando estas en la piscina y nadas de espaldas, bueno, no hace falta que nades te mueves de espaldas, o simplemente haces "el muerto", y tienes las orejas bajo el agua, y oyes tu respiración así. Es totalmente relajante. Podría pasarme horas y horas así en la piscina. Todo esto viene a que hoy, por fin, después de un mes apuntada, he ido a la piscina. Y ha estado muy bien. No habia nadie, y mejor aún, no había nadie del instituto. Ha sido muy relajante.

Supongo que cuando encuentras un caramelo en un bolso, que debias haberte comido hace un mes (un mes ya, como pasa el tiempo), es lo que pasa. Sí, se te pone esa típica sonrisa de felicidad en la cara, pero por dentro por dentro estás triste porque ya hace un mes, y eso es mucho tiempo. El caramelo, lo he mirado, con... ganas de comermelo, pero lo he dejado en la mesa, porque es que lleva un mes en el bolso y quieras que no, no debe estar muy bueno que digamos. Aunque recuerdo que esos caramelitos blandos estaban bastante ricos, y me gustaria comerme uno ahora, y es algo que no puedo evitar, y noto que el caramelo me mira con ojitos de cordero degollao, pero no me lo puedo comer, y él: Cómeme cómeme! Y yo... Nooo, no puedo. Todo muy gráfico y tal.

Últimamente pienso que escribo mucho y digo muy poco, será creo yo porque no tengo nada que decir. En realidad, he quedado a las 7 y son las 6y55, y estoy aquí escribiendo, que no diciendo nada, pero es que es mi padre que es un lento. Y que está paranoico últimamente con tanto caso de pedofilia internefílica en la tele, que me llegan unos deuvedes de a 2 metros bajo tierra a casa, y ya me quiere el hombre investigarlo todo, aunque yo le digo que no, que el correo es privado y eso constituiria delito y se calma, pero bueno, tampoco tengo nada que esconder, porque es a dos metros bajo tierra, pero leer la carta eso si que no, no y NO.

Me voy, que ya le oigo bajar las escaleras...