viernes, agosto 19, 2005

- 7y30 a.m -

Es la hora en que ha empezado a taladrar. A las siete y media de la mañana. El primer día, empezó a las 10, una hora bastante normal, pero ahora ha decidido que ya estamos acostumbrados, y que a las 7y30 le va mejor. Así que estoy pensando una pequeña venganza. Un día de estos escogidos al azar, voy, y le meto la perforadora por el culo. O por lo menos salgo al balcon y grito: Hijo de perraaaaaaaaaaaaaaaaa, cabrooooooooooooon! Lo juro. Que yo y el poco sueño hacemos una combinación muy mala. Ni la siesta, la respeta! El no es un obrero como los demas, no, el esta dale que te pego todo el maldito día ininterrumpidamente. Es superobrero. Sé que, realmente, él sólo esta haciendo su trabajo, pero en alguien tengo que descargar mi ira acumulada tras dias de sufrimiento de un dolor de cabeza infernal por su culpa. Y solo nos queda esperar que le domingo no trabaje.

En otro orden de cosas, mi vida esta siendo últimamente, muy triste. No hago nada mas que rezar que llegue mañana que es la fiesta del cumple de M y tengo ganas de desvariar un rato, leer Potter y cagarme en el obrero. También vagueo un poco por Tusseries, y me he acabado la tercera de QAF (y la segunda de OTH) pero una extraña vagueria infernal me impide ver la cuarta. Brian es Dios. He descubierto que G.Martin (de OT) debe ser del Barrio del Carmen, o tener amigos o familiares alli, porque esta lleno de carteles para que le votemos favorito, y vi a Ines Ballester, que si era la q me señalaba mi madre, tiene un culo super enorme que en la tele le reducen seguro.

Ecuchando Pumpumpumpumpum la perforadora infernal, por qué, oh, POR QUÉ, tiene que haber piedra en el terreno?