domingo, diciembre 17, 2006

El del día que caminé con 10000 euros en los bolsillos

Corría el año 2004. Concretamente era viernes, 12 de marzo de 2004. Hacía poco que mi abuela había vendido el chalet y tenía una parte de dinero que quería entregar a sus tres hijas. Había sacado del banco 90000 euros, 30000 para cada una. Y los tenía dispuestos en la mesa camilla de la salita, en montoncitos de varios miles. Cuando yo llegué a su casa después de la manifestación de esa tarde, estaban ahí mis padres y mis tias y mi abuela, y los montoncitos y las bolsas. Y nos dio los treintamil. Lo más normal, con todo el gentío que había esa tarde por las calles de cualquier ciudad habría sido meterse rápido en el coche y directos a casa sin parar. Pero se ve que estabamos cegados por la emoción, o algo, que no se nos ocurrió nada mejor que ir a cenar al chino. Con, claro, todo el dinero encima, no lo ibamos a dejar en el coche por si lo robaban. Caminar con 5000 euros en cada uno de los dos bolsillos grandes de tu pantalón es una sensación cuanto menos, extraña. Y ya sentarse a cenar, en un chino, con tus padres y 30000 euros entre nosotros, aún más. La risa floja afloraba entre nosotros cada minuto, y lo recuerdo como algo sumamente divertido. Luego el dinero se perdió en coches e hipotécas varias y ya no he vuelto a caminar con grandes sumas en los bolsillos.

P.d: Veo momentos que pasan por delante de mis narices, y solo soy capaz de saludarles.

[Que viva (un poco mas) el amor - La casa azul]